domingo, 6 de noviembre de 2011

Más allá de la cámara...

"Una cosa que he descubierto es que es más fácil entrar a un mundo que salir de él. La parte dolorosa es salir cuando ya se han creado uniones y vínculos."


"Bruce Davidson


"Todas mis fotos son retratos - autorretratos, porque no se puede fotografiar a alguien sin reflejarse como un eco, como un murciélago que envía una señal que regresa. Uno obtiene no sólo una imagen de quién se fotografía, sino al mismo tiempo una imagen de uno mismo"


"Bruce Davidson


"Yo creo que la fotografía para mi se convierte en una parte de mi ser. Una vez que he capturado algo en la película, ya no quiero que nunca me deje. Es como un niño a quien quiero ver crecer."


"Bruce Davidson


 Hijo de madre soltera. Con 10 años su madre le montó un cuarto oscuro en casa y comenzó a hacer fotografía paseando libremente por las calles de su barrio.
    Trabajó con un fotógrafo local, que le enseñó la técnica de la fotografía y conceptos de iluminación y positivado. Comenzó a moverse por el metro elevado de Chicago, explorando barrios, observado a la gente y desarrollándose como fotógrafo.
    Con 16 años  ganó su premio más importante, el Kodak National High School con una fotografía de un búho en una reserva natural
 Pudo profundizar sus conocimientos y desarrollar su pasión durante sus estudios en el Rochester Institute of Technology y en la Universidad de Yale. Más tarde, el servicio militar lo condujo a París, donde conoció a Henri Cartier-Bresson, uno de los cuatro fundadores de Magnum Photos, la célebre cooperativa fotográfica. Cuando dejó el ejército en 1957, Davidson trabajó como fotógrafo independiente para la revista Life y se convirtió en miembro de pleno derecho de Magnum Photos en 1959.
 Este fotógrafo siempre centra su interés en personas que viven periodos de transición o de búsqueda de significados: humaniza la sociedad que retrata, y lejos de presentarlos como objetos de compasión, él les otorga vigor y vitalidad, su visión de la vida, sus luchas y sus emociones…retrata con maestría emociones como la soledad, la desesperación, el amor, la determinación y la incertidumbre. Su  realismo induce a la preocupación social y la simpatía de extraños
Davidson acumula una documentación del Movimiento de Derechos Civiles durante varios años en la década de 1960. Fue un examen completo de la época turbulenta y la épica y desafiante viaje de autodescubrimiento. Él relató el período fotografiando tanto en el NorteMov y el Sur, los negro y los blancos, el fracaso y el triunfo, el amor y el odio, y finalmente, la pasión, la tiranía, y el desafío audaz.
Su Crónica sobre derechos civiles, es considerada aún hoy un clásico sobre el tema y por ella recibió un Guggenheim Fellowship en 1962 y el proyecto fue expuesto en el MOMA de Nueva York. El principal eje en las fotos de Davidson es la transición: las personas que se mueven en busca de un significado personal. Humaniza a todo quien retrata y explora en su flash sus luchas y deseos. 
 Su obra muestra el triunfo del espíritu humano, que representa a los grandes obstáculos que enfrentan las personas, a medida que avanzan en su vida cotidiana y la búsqueda de su lugar en el gran esquema de las cosas.
En 1962, la fundación Guggenheim le concedió una beca que le permitió dedicarse al estudio del Movimiento para la igualdad de derechos cívicos en América.   En 1966, el NEA (National Endowment for the Arts) le concedió por primera vez una beca de fotografía como recompensa a su testimonio sobre las terribles condiciones sociales de un bloque de viviendas del este de Harlem que estudió durante dos años.
Para la realización del libro “East 100th Street”, ( 1968) Davidson estuvo fotografiando durante dos años una calle del este de Harlem. Para ello acudía día tras día para sentarse con la gente y charlar con ellos hasta ganarse su confianza para fotografiar niños, caras, familias, habitaciones. La destreza, extraordinaria visión y profundo respeto hacia los fotografiados hacen de “East 100th Street” una potente declaración de dignidad y humanidad hacia todas esas personas.
Una mirada sobre la vulnerabilidad e intensidad de la juventud en un complejo retrato de la nostalgia, la ansiedad y la alienación. Davidson, fotógrafo de Magnum siempre plantea historias sociales y emocionales a la vez, documentalista puro. Brooklyn Gang (1959) de Bruce Davidson es un libro únicoporque abrió la puerta al gran tema de los sesenta: la juventud como protagonista de la cultura y de los movimientos sociales. Este "gang" o pandilla que se autodenominaba "The Jokers" fue fotografiado a lo largo de un año y nos muestra una jóven norteamérica algo gris y "cool"en un intenso proceso de búsqueda de identidad.Se trata de un trabajo honesto y emocional en el que realmente el fotógrafo se aventura a implicarse en la vida de los residentes, su resistencia frente a la pobreza, el aumento de consumo de drogas, la delincuencia, el deterioro y abandono…
 Davidson decía:"Yo tenía veinticinco años y ellos unos dieciséis. Podría haber sido tomado por uno de ellos. Mi forma de trabajar es entrar en un mundo desconocido, explorarlo a lo largo de un período de tiempo y aprender de él. En el momento en que se me permitió ser testigo del miedo, la depresión y la ira, pronto me di cuenta que yo también estaba sintiendo algo de su dolor. Al permanecer cerca de ellos, descubrí mis propios sentimientos de fracaso, de frustración y de rabia"
 Davidson es experto en la documentación de las personas o sujetos en transición, si los adolescentes rebeldes mayoría de edad, personas perseguidas que luchan por la igualdad, los pobres urbanos en medio de pronto-a-ser demolidas viviendas , un submundo arenosa antes de ser esterilizada, un circo ambulante que pronto se disuelto, o el paso de las estaciones en medio de la magnificencia, el esplendor, y el dolor humano evidente dentro de Central Park.
 Davisdson busca chica rubia a la que le hizo  una foto hace 50 años
El fotógrafo Bruce Davidson toma esta fotografía en Londres en el año 1960 cuando la joven se dirigía a un concierto con sus amigos, desde entonces ha quedado cautivo y en busca de esta persona para compartir el premio que ha ganado.
Después de hablar cierto tiempo con sus compañeros, Davidson convenció a la joven de sacarle una fotografía pues curiosamente, para un concierto, la chica llevaba un gato y su saco de dormir.
 Davidson explora todos los aspectos, espacios interiores y la vida en la calle, acercándose a todo con un nivel de dignidad y respeto. En este trabajo, puede admirarse el ojo fotográfico de Davidson y su capacidad para detectar pequeños detalles que muchos otros munca vieron…o no quisieron ver.
 Davidson utiliza Tanto el “Parque Central” como la vida en “El Metro” como metáforas de una experiencia humana más amplia, el escaparate de imágenes un tanto surrealista y de extrema diversidad,  una especie de teatro de la conducta humana. Las imágenes, cargadas de efectos de iluminación y color, muestran el ambiente de  los bajos fondos de Nueva York,  a la vez que acentúa los más bellos detalles del día a día, incide en presentar el parque como un lugar mágico y etéreo, un lugar de la renovación,  en el centro de un de las ciudades más grandes del mundo: para ello Davidson muestra una convergencia de personas de clases y orígenes completamente diferentes
 Davidson crea una expresión de la condición humana mediante la captura de sus temas y situaciones diferentes en un lenguaje visual personal y lírico, como él es capaz de trascender la raza, la cultura, y el fondo, lo que une a todos sus súbditos en una experiencia humana compartida poética. El nos permite ver la belleza y pedazos de nosotros mismos en una amplia serie de personas. A través de obras de Davidson, vemos cómo todo el mundo comparte experiencias similares, como que todos estamos unidos, y por lo tanto como todo el mundo puede realmente se relacionan entre sí.Davidson continúa trabajando como fotógrafo editorial. Sus fotografías aparecen en todo el mundo y en muchos museos. Por otra parte, Davidson ha dirigido dos premiados cortometrajes, un documental titulado Vivir de la tierra y una historia más surrealista titulado Pesadilla Isaac Singer y la barba de la señora de Pupko.

Vive en Nueva York con su esposa, Emily.

16 comentarios:

  1. La verdad es que consigue capturar muy bien con la cámara la carga ambiental del momento.

    Sus frases las encuentro muy elocuentes.

    Abrazo y saludos afectuosos de domingo lluvioso :-)

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  2. Mira que estas fotos plasman personajes cotidianos y están bien...pero a mi me gustan más otros autores que has publicado con anterioridad.
    Te saludo y deseo que sigas bien.

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  3. Puedes sentir la tristeza de los rostros y el ambiente de pobreza que viven unos y que se resiste para otros. La frase de arriba, la primera me encanta, y es cierto que cuando tienes que dejar algo que te gusta, que dificil es, jeje
    un abrazo

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  4. no conocía la de la niña transparente "a través de la cortina"

    me gusta el contraste con la imagen movida de la televisión

    besos

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  5. Me quedo con la de las palomas preciosaaaaaaaaaaaaaaaa. Besossssssss

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  6. Antonio

    Es especial, a mi, estas fotos en concreto me transmitieron mucha soledad.

    Un abrazo

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  7. Anna Jorba

    Será que transmiten mucha tristeza...

    Un abrazo

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  8. orthos62

    Es que hace que te situes en el lugar. Yo, casi podia percibir, con los ojos cerrados, el olor del lugar...

    Un abrazo

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  9. Carmen

    ¡¡¡Aja!!! a mi también me lamó mucho la atención la de la tele.

    Besos

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  10. Lola

    Tu con tus animalillos ehhh jajajaj

    Un abrazo

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  11. Trini

    Has dado en la diana con tu frase mi niña

    Besos

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  12. Qué fotos tan geniales, Teresa, son una pasada, y encima las frases suyas... sobre todo la primera, la de que es más fácil entrar en un mundo que salir de él... Y su compromiso con el ambiente que fotografía. Genial.

    Una abraçada.

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  13. Tremendas fotos, de un tiempo muy duro, en donde la discriminación hacía (e hizo) estragos.

    Cariños Pluvisca.

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  14. Ximo

    La verdad es que es una fotografia en la que se nota que se ha puesto el alma

    Una abraçada

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  15. Adriana Alba

    Si, hizo muchos, aunque hoy en dia tambien los hay, solo que no hay tanto fotoreportaje de calle

    Un abrazo

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